11 de julio de 2015

LA MIGRACIÓN ILEGAL EN EL CARIBE: MÁS ALLÁ DEL DILEMA NORTE/SUR

Intervención de Canciller de Haití en la OEA revive discusión sobre la migración ilegal en el Caribe.

Xiomara Lorena ROMERO PEREZ (11/07/2015)

Que se señale que los latinoamericanos intentan alcanzar de manera irregular territorio estadounidense o europeo puede resultarnos común, sin embargo, la situación de la migración irregular al interior de los países latinoamericanos es muy frecuente y menos estudiada. Hoy en día, la preocupación por esta situación ha recobrado su actualidad pues se anunció que el Canciller de Haití, Lener Renauld, va tratar el tema migratorio de haitianos en República dominicana en el Consejo Permanente de la OEA.

I. Antecedentes de la migración ilegal de haitianos hacia República Dominicana

A. Una migración en principio de caracter laboral 

La problemática migratoria entre los dos países se originó en la segunda década del siglo XX durante la ocupación militar de los Estados Unidos en la isla. En ese momento, empresarios estadounidenses localizados en República Dominicana, favorecieron la migración irregular de haitianos para trabajar en campos azucareros. Ante el aumento de esa población trabajadora, en 1937, esto es, tres años después de finalizada la ocupación de Estados Unidos, Trujillo, Dictador de República Dominicana, ordenó la matanza de 10.000 trabajadores haitianos.

La situación de los trabajadores haitianos en República Dominicana solo vino a regularse en 1952.  En ese año, los presidentes de estos dos países acordaron un tránsito continuo aunque temporal de haitianos trabajadores en ingenios azucareros dominicanos, también conocidos como braceros. No obstante, de nuevo, el número de haitianos irregulares en República Dominicana aumentó, esta vez, a raíz del terremoto de 2010, desastre natural que devastó casi la totalidad de Haití.

B. Una política migratoria dominicana inflexible 

A pesar de que se puede hablar de una persistencia de tensiones en materia migratoria entre estos dos Estados caribeños, la más seria y reciente crisis diplomática por ese motivo entre estos dos Estados data de 2013. En ese año, el Tribunal Constitucional de República Dominicana adoptó una decisión sin precedentes: declarar que los hijos de extranjeros en tránsito nacidos en su territorio a partir de 1929, no tienen derecho a adquirir la nacionalidad de ese país. Por lo cual, desde entonces, las medidas relativas al derecho a la nacionalidad y la migración de República Dominicana han sido el foco de una crítica constante de la comunidad internacional regional.

El problema se resume en que el Estado dominicano no reconoce la nacionalidad a haitianos que han permanecido en su territorio por años, quienes, además de soportar un estatus irregular permanente, lo transmiten a sus hijos aun cuando aquellos hayan nacido en territorio dominicano. Esto porque, a pesar del reconocimiento del principio jus soli en el artículo 11 de la Constitución dominicana y como consecuencia de la interpretación del Tribunal Constitucional, la mayoría de haitianos que se encuentran en República Dominicana son considerados como extranjeros de tránsito, por lo cual no pueden beneficiarse de la disposición constitucional.

II. La actualidad de la situación   

A. La puesta en marcha de un plan nacional de regularización de extranjeros ilegales en República Dominicana

No hay una cifra cierta sobre cuántos haitianos en situación irregular se encuentran en República Dominicana. Las cifras oficiales refieren 800.000 personas pero se habla de más de un millón, número considerable en relación con la población del Estado dominicano (14,5 millones de habitantes en 2013), y también si se toma en cuenta la concentración de la población en la isla (El Estado de Haití ocupa casi la tercera parte de la isla, aunque concentraba una población de 10,3 millones de habitantes en 2013) .

Ante la evidencia, en noviembre de 2013, República Dominicana aprobó el Plan Nacional de regularización de los extranjeros ilegales. En dicho Plan, se estableció el 18 de junio de 2015 como fecha máxima para que los extranjeros presentaran su caso ante las autoridades con el fin de poder regularizar su situación. De acuerdo con la Dirección General de Migración dominicana, algunos haitianos decidieron retornar voluntariamente a Haití sin acogerse al plan. Sin embargo, según algunos testimonios, quienes optaron por acogerse al plan temen que el gobierno dominicano proceda a efectuar deportaciones masivas con los datos recolectados.

El 6 de julio de 2015 el Ministerio del Interior y de Policía de República Dominicana comenzó la entrega de carnés de regularización y hoy en día el proceso continúa.

B. La Comunidad regional a la expectativa

La situación no es nada sencilla, en defensa de su política migratoria, las autoridades dominicanas argumentan, de una parte, que los migrantes haitianos irregulares son los responsables del aumento de la delincuencia y del crimen en ese país. Por otra parte, el Canciller dominicano afirma que la política migratoria dominicana no ha dado lugar a ningún caso de apátridas o ausencia total de nacionalidad.

Ante la tensa situación, la OEA planea enviar los días 10 a 14 de julio una misión especial a República Dominicana y a Haití para evaluar los primeros efectos de la puesta en marcha del Plan de regularización de extranjeros implementado por República Dominicana. Se espera entonces que no haya ningún obstáculo para el desarrollo de la misión y que ésta sea la oportunidad para solucionar definitivamente la crisis migratoria entre esos dos países.

La migración ilegal no es por consiguiente un problema exclusivo de los países desarrollados frente a sus vecinos menos desarrollados. Esta es una situación presente también al interior de Latinoamérica que afecta el disfrute de los derechos humanos de la población expuesta a sus efectos. Por lo tanto, se considera oportuna la vigilancia permanente de la comunidad internacional regional. Al respecto se enfatiza en la necesidad de adoptar normas comunes mínimas impulsadas desde instancias internacionales comunes tales como la OEA.

Fuentes: